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Desde el pasado 10 de marzo, día del aniversario de la fracasada rebelión tibetana de 1959 que causó la huida al exilio del Dalai Lama, monjes budistas secundados por la población civil han protagonizado diversas protestas en el Tíbet. Estas manifestaciones desembocaron en unos disturbios en la ciudad de Lhasa que costaron la vida a 19 personas, según la versión oficial de China, y a 140 según el Gobierno tibetano en el exilio en la India.
A raíz de estos disturbios, algunas voces de la comunidad internacional han comenzado a hablar de un posible boicot a los Juegos Olímpicos que se celebrarán el próximo verano.
El boicot ¿ayudaría a cambiar la situación del Tibet? La celebración de estos Juegos debe ser una oportunidad para el diálogo entre China y el resto del mundo, pudiendo convencer así a las autoridades chinas de la necesidad de proteger a las minorías, los derechos humanos y la democracia. En eso es en lo que hay que emplear nuestras fuerzas, en que se elimine cualquier manifestación de violencia, en que el diálogo derive en un cambio de postura de China que se logre un cambio de rumbo hacia su democratización.
Hay que recordar además que las propias autoridades tibetanas en el exilio han manifestado su deseo de que se celebren estos Juegos y, por tanto, rechazan el boicot.
Por último, son muchos los deportistas, ajenos a este tipo de conflictos que llevan años entrenando para estos juegos en sus correspondientes disciplinas, empleando mucho esfuerzo y dinero en su preparación.
A raíz de estos disturbios, algunas voces de la comunidad internacional han comenzado a hablar de un posible boicot a los Juegos Olímpicos que se celebrarán el próximo verano.
El boicot ¿ayudaría a cambiar la situación del Tibet? La celebración de estos Juegos debe ser una oportunidad para el diálogo entre China y el resto del mundo, pudiendo convencer así a las autoridades chinas de la necesidad de proteger a las minorías, los derechos humanos y la democracia. En eso es en lo que hay que emplear nuestras fuerzas, en que se elimine cualquier manifestación de violencia, en que el diálogo derive en un cambio de postura de China que se logre un cambio de rumbo hacia su democratización.
Hay que recordar además que las propias autoridades tibetanas en el exilio han manifestado su deseo de que se celebren estos Juegos y, por tanto, rechazan el boicot.
Por último, son muchos los deportistas, ajenos a este tipo de conflictos que llevan años entrenando para estos juegos en sus correspondientes disciplinas, empleando mucho esfuerzo y dinero en su preparación.
El deporte siempre ha pretendido ser sinónimo de ausencia de violencia y de sana competencia. Que su espíritu se ligue definitivamente a la línea del debate de estos días y dejemos, por favor, de plantearnos inútiles e improductivos obstáculos para la celebración de los juegos.
5 comentarios:
Casi siempre sucede
Es indudable que cuando se celebra cualquier acontecimiento importante a nivel internacional, se utiliza para sacar provecho, bien sea de índole política o de otro tipo de reivindicación por parte de grupos o organizaciones que se quieren hacer escuchar.
En esta ocasión, con motivo de la celebración de los JJOO en este país, ha surgido la polémica del conflicto político que les afecta.
Por mi parte ratificar rotundamente que fuera de todo ésto, debe triunfar el espíritu olímpico y dejar paso a la fiesta y la competición deportiva entre todas la naciones.
Así que se dejen de tonterías y que sepan estos señores que "lo esencial en la vida no es vencer, sino luchar bien".
Que todos disfrutemos de unos magníficos JJOO.
Isab
Fe de erratas.
Debido a la rapidez en la redacción y publicación de mi comentario, cometí un error, que paso a subsanar:
"grupos u organizaciones"
Mis disculpas ante sus ojos, lectores y redactor/autor del blog.
Buen día.
Isab
Hay que valorar que los chinos también sufren la represión, al vivir sin democracia,y no sólo los tibetanos.
Aurora, en esta vida todo tiene que tener cabida.
Yo creo que todos debemos luchar para que no se violen los derechos humanos, pero considero igualmente, que nadie tiene derecho a destrozar una celebración de fraternidad entre todos los pueblos del mundo, que en sí misma, sería una violación de esos derechos humanos.
Chinos, tibetanos,todos tienen derecho a defender sus posturas,... pero dejemos que los Juegos Olímpicos sigan su curso, fuera del marco político y estos temas se traten donde tienen que hacerse, ¿no crees?
Un saludo a todos
A mi que se relacionen los JJOO con la política no me gusta. Creo que la política trata de meterse a menudo en el deporte (a veces también el deporte quiere meterse en política, pero es menos habitual)
Yo también escribí sobre esto hace poco en mi blog http://acartier.wordpress.com/2008/03/27/%c2%bfboicot-a-los-jjoo/
Esperemos tener unos JJOO en paz. Y que sirva de lección a China y a todos esos países que no cumplen con los DDHH.
Un saludo
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